El P. Mariano de Blas, LC, fue quien inició el Regnum Christi en Chile. A fines de los años ’70 viajaba desde México a brindar formación a jóvenes mujeres atraídas por el carisma del Regnum Christi. “Me produjo una gran emoción porque hace 43 años me tocó iniciar de cero el Regnum Christi con un grupo de chicas del colegio Villa María”, comenta. El Padre Mariano cumplirá 50 años de sacerdocio el próximo 24 de diciembre.
El Padre Mariano de Blas, LC, es oriundo de San Bartolomé de Pinares, pueblo español ubicado en la provincia de Ávila. Nació al alero de una familia católica donde se formó junto a otros cinco hermanos y una hermana. Su labor actual en Chile es apoyar a las secciones de señores de Las Condes y La Dehesa, por lo que se le puede ver con frecuencia en Piedra Roja.
Durante sus casi cinco décadas de sacerdocio ha realizado diferentes labores, la gran mayoría en México, con una pausa de nueve años de servicio pastoral en Estados Unidos; párroco misionero en Chutumal, México; director de la sección de chicas en Ciudad de México, capellán de las Consagradas del Regnum Christi, director de la sección de señores de Saltillo, director de señores en Guadalajara, coordinador de apostolado, director del colegio CEYCA, director de señores en Monterrey; superior y director de señores y señoras de San Luis Potosí, capellán del Colegio Andes San Luis Potosí; capellán de las señoras en Piedras Negras y Nuevo Laredo, y capellán de uno de los tres Colegios Mano Amiga de Monterrey.
¿Cómo conoció al Regnum Christi y a los Legionarios de Cristo?
Conocí a la legión a los 10 años y pensé en la vocación a esa edad por un juego de florecitas. Iba caminando por una callecita de mi pueblo y de repente vi a un muchacho, de unos 12 años, que estaba jugando a la parábola de las almas que se van al cielo, y tenía un montón de flores, y había un canalito que era la vida y al final dos charcos que eran el cielo y el infierno. Había algunas flores que se iban al cielo y todos aplaudían y otras se iban al infierno y todos se ponían serios. Yo participé inmediatamente en el juego. Una vez que todos nos regresamos a nuestras casas, me puse a pensar cómo podía hacer para que todas esas almas, las flores, se fueran al cielo y la respuesta era siendo sacerdote. Así pasó por mi mente el inicio de mi vocación.
¿Fue muy difícil su proceso de discernimiento?
No me costó nada, al contrario, me sentía el niño más feliz del mundo. Y ahora después de tantos años, sigo en la misma dinámica del juego, nada más que ahora las flores son almas concretas, las que escuchan la radio, a las que he atendido en México y ahora en Chile.
¿Qué fue lo que le atrajo del Regnum Christi?
Pues yo quería ser sacerdote, salvar almas, no conocía a los Legionarios de Cristo. Fue en la apostólica, cuando fui conociendo y queriendo a la Legión y al Regnum Christi. El Regnum Christi nació cuando yo estaba estudiando teología en Roma, me atrajo su espiritualidad, sus grandes obras, el cariño por el Papa, el amor a Cristo y a María.
Su relación con Chile
A fines de los años 70, mientras estaba viviendo su vocación como director de la sección de chicas en Ciudad de México, comenzó a visitar Chile con la idea de dar a conocer el carisma a las jóvenes. Todo surgió por el interés que tuvo Paca Rodríguez, chilena que había vivido en México, y que al regresar a Chile comenzó a compartir, con sus compañeras de colegio, su experiencia en el Regum Christi de Ciudad de México. “Dios intervino pues, quería que empezara este movimiento en este país”, comenta. Cuando alguna de las chicas de México venía a nuestro país a ayudar, explica que ponían un mapa de Chile lleno de papelitos con propósitos, el que a su regreso tenía que estar limpio. “El Regnum Christi transforma a las personas”. En julio del ’78 se incorporaron las primeras jóvenes y luego en diciembre de ese año un grupo más grande de 29 alumnas del Colegio Villa María. La ceremonia fue en San Francisco de Mostazal, en un fundo de la familia Huidobro.
Su incursión en los medios de comunicación
El Padre Mariano lleva 18 años en Guadalupe Radio, donde actualmente tiene el programa “La alegría de vivir”, donde reflexiona sobre el catolicismo y su vínculo con el amor. Además, ha escrito 19 libros, editado muchos discos compactos y podcast. Llegó al mundo de los medios al hacer cápsulas de TV en Saltillo, las que luego hizo en Guadalajara y Monterrey, México.
Desde hace 18 años, Ud. tiene un programa en Guadalupe Radio. ¿Qué rol ve que tienen los medios de comunicación en la evangelización de la sociedad?
Sirven mucho. En Los Ángeles yo vi a miles de personas que se acercaban a los sacramentos, que recuperaban su amor a la Iglesia católica, a su matrimonio e incluso los ayudaba a vivir su fe con alegría. Creo que es el apostolado que reúne a más personas: desde Tijuana a San Diego, y por el norte a San José, California.
¿P. Mariano, tiene algún nuevo proyecto en esta línea?
Voy a escribir un libro que se titula “Personajes de la Biblia” donde los hago hablar sobre su propia vida y aplicando sus testimonios a nuestra vida. También voy a seguir con los programas de Guadalupe Radio, y pienso traer algunos libros editados en Los Ángeles para ofrecerlos acá.
Dónde escuchar su programa
Se debe descargar la App de Guadalupe Radio desde Google Play o Aple Store. Luego registrar los datos personales, ir debajo de la pantalla, escoger Live (audio video) o Podcast y darle play. Otra alternativa es desde su sitio web: www.guadaluperadio.com.
