«Porque estuve preso y me visitaste» – El P. Arturo Guerra, L.C. y el rostro de Cristo en las misiones carcelarias
Lo que me ha tocado ver y percibir, misión tras misión, es que para un número considerable de personas, la experiencia dura de la cárcel les lleva a pisar fondo en su vida y a iniciar fatigosa pero decididamente un proceso, profundamente humano, auténtico y hermoso, de toma de conciencia del mal realizado (cuando ha sido así).
