La Red de Colegios Regnum Christi en el territorio de Chile y Argentina, que abarca más de tres décadas de trayectoria educativa, se ha convertido en una red que no solo ofrece una educación académica, sino que también busca la formación integral de sus estudiantes con los valores de la tradición católica. A través de un modelo educativo enraizado en la fe y orientado al servicio y formación de apóstoles, estos colegios se presentan como espacios donde la comunidad educativa crece unida bajo un mismo propósito: la transformación de la sociedad desde los valores del Evangelio.
La Red de Colegios Regnum Christi en Chile y Argentina presentó su informe anual 2024, donde detalla las acciones y logros alcanzados durante el año, así como las experiencias compartidas por directivos, educadores y miembros de la comunidad. En ese informe, se subraya el compromiso con la formación integral de los estudiantes, el trabajo en equipo, y la importancia de la evangelización en cada uno de los colegios de la red.
El Informe Anual 2024 resalta el trabajo colaborativo de los 15 colegios del Regnum Christi en Chile y Argentina, unidos por la misión de formar líderes cristianos comprometidos con la transformación y evangelización de la sociedad, siguiendo el Ideario y el Proyecto Educativo Institucional. A lo largo del informe anual se evidencia el crecimiento sostenido de la Red de Colegios, consolidando el trabajo conjunto de las comunidades educativas y el firme compromiso con la formación integral de los estudiantes. La identidad católica, la excelencia académica, el acompañamiento centrado en la persona y el espíritu apostólico son los pilares que distinguen a los colegios, proyectándose con esperanza ante nuevos desafíos. Además, se pone en valor que el Ideario y Proyecto Educativo no son solo principios teóricos, sino realidades vividas en cada aula, en la formación espiritual y en la vida cotidiana de las comunidades educativas. Finalmente, se destaca la importancia de la sostenibilidad financiera del proyecto educativo, fundamental para garantizar la continuidad y el cumplimiento de la misión a largo plazo.
Directivos, educadores y miembros de la comunidad comparten sus experiencias y reflexiones sobre el sentido de pertenencia, la formación integral de los estudiantes y la importancia de trabajar juntos para alcanzar un futuro esperanzador basado en principios católicos.
Un modelo educativo inspirado en el Evangelio
En palabras de Alan Wilkins Altamirano, director ejecutivo de la Red de Colegios Regnum Christi del territorio, la misión de estos colegios es clara: formar apóstoles que ejerzan un liderazgo católico transformador en su entorno. Con un ideario común, cada acción educativa busca llevar a los estudiantes a descubrir lo mejor de sí mismos, desarrollando sus talentos con amor y poniéndolos al servicio de los demás. Este enfoque, que se fundamenta en el amor y el servicio a Dios y al prójimo, es el que caracteriza a todos los centros educativos de la red.
Desde los comienzos de la Red de Colegios Regnum Christi en Chile y Argentina, en la década de los 80, la visión educativa ha tenido una constante: formar personas libres, maduras y comprometidas con la fe. Cada uno de los colegios, en sus diferentes localidades, ha seguido esta misión a lo largo de los años, generando una sólida red de aprendizaje y crecimiento compartido. Además de su enfoque académico, los colegios fomentan un profundo sentido de comunidad, donde el acompañamiento espiritual y humano de los educadores se entrelaza con la formación académica. La experiencia vivida en estos centros educativos no solo prepara a los estudiantes para afrontar los retos del mundo moderno, sino que los forma como auténticos apóstoles, llamados a llevar la luz del Evangelio a todos los rincones de la sociedad.
La diversidad de colegios en Chile
La Red de Colegios está conformada por varias instituciones que, aunque diversas en sus ubicaciones y características, comparten el ideario y la misión. Desde el Colegio Cumbres, que comenzó con apenas 54 alumnos en 1986, hasta el Colegio La Cruz, con más de 30 años de historia, cada centro ha forjado su camino con el mismo compromiso de excelencia y fe. El Colegio Cumbres, por ejemplo, ha pasado de ser una pequeña institución a convertirse en una comunidad educativa consolidada con una visión clara: «Todos somos Cumbres».
Por otro lado, el Colegio Everest, fundado en 1995, ha experimentado también un crecimiento constante. En 2025, el colegio celebrará sus 30 años de historia, consolidándose como un referente educativo en Chile. El sentimiento de pertenencia es palpable entre los estudiantes y las familias, que encuentran en el Everest un espacio para formarse no solo académicamente, sino también espiritualmente.
Otros colegios, como el Colegio San Isidro y el Colegio Maitenes, también se han destacado por su trayectoria en sus respectivas comunidades. San Isidro, por ejemplo, con su primera generación egresada en 2001, ha formado generaciones de estudiantes comprometidos con la fe y el servicio a los demás, mientras que Maitenes ha logrado ser un referente de educación en Melipilla, donde el Regnum Christi ha jugado un papel fundamental en su crecimiento tanto espiritual como académico.
El compromiso en Argentina
La red de colegios en Argentina ha experimentado un crecimiento notable desde su fundación. Desde el Colegio Oakhill en Pilar, inaugurado en 2002, hasta el Instituto Humanista de la Santísima Trinidad en Salta, cada colegio se ha caracterizado por su fuerte enfoque en la formación integral, apostando por un desarrollo académico riguroso acompañado de una sólida formación humana y cristiana.
El Colegio Oakhill, en su modalidad bilingüe y con la integración de diversas nacionalidades en sus aulas ha permitido crear un ambiente multicultural y enriquecedor para los alumnos. El Colegio Betania, ubicado en Buenos Aires, también ha mantenido una conexión profunda con la comunidad parroquial, lo que le ha permitido forjar un camino de fe y compromiso en la vida de sus estudiantes.
Cada uno de los colegios en Argentina sigue el mismo patrón de formación integral, buscando la creación de líderes comprometidos con su fe, capaces de transformar la sociedad con sus talentos. Estos colegios no solo se enfocan en la excelencia académica, sino que también se esfuerzan por ser auténticas comunidades de fe, donde los valores del Evangelio se viven cotidianamente a través de los sacramentos, los retiros y los proyectos apostólicos que los alumnos desarrollan.
Los Colegios Mano Amiga: formación integral con un compromiso social
Los colegios de la Fundación Mano Amiga, tanto en Chile como en Argentina, representan un pilar fundamental en la Red de Colegios Regnum Christi, destacándose por su compromiso con la educación de calidad y la inclusión social. Fundados con el objetivo de ofrecer una educación integral a niños y jóvenes de sectores vulnerables, estos colegios se enfocan en formar no solo estudiantes académicamente preparados, sino también personas con un fuerte compromiso ético, humano y cristiano.
En Chile, la Fundación Mano Amiga sostiene tres colegios particulares subvencionados: el Colegio San Juan Diego en Recoleta, el Colegio Santa Teresa de Jesús de Los Andes en Huechuraba y el Colegio Santa María de Guadalupe en Colina. El Colegio San Juan Diego, por ejemplo, comenzó en 1989 con apenas 32 alumnos en una pequeña construcción de madera y hoy forma a más de 1.000 estudiantes. A lo largo de los años, ha crecido significativamente, y su comunidad educativa está profundamente vinculada al trabajo pastoral, teniendo como foco la formación de líderes cristianos capaces de transformar su entorno.
En Huechuraba, el Colegio Santa Teresa de Jesús de Los Andes ha estado al servicio de la comunidad desde 1989, y ha crecido tanto en infraestructura como en la oferta educativa, que ahora incluye un enfoque técnico profesional para sus estudiantes. La fundación del colegio y su posterior integración a la Red de Colegios Regnum Christi en 2006 permitió fortalecer su misión educativa, que no solo se centra en la formación académica, sino también en los valores cristianos y el acompañamiento pastoral a los estudiantes.
El Colegio Santa María de Guadalupe, en la comuna de Colina, comenzó en 2010 con 95 alumnos y actualmente acoge a más de 800 estudiantes. Este colegio, al igual que los otros de la Fundación Mano Amiga, ha enfocado su esfuerzo en dar acceso a una educación de calidad a jóvenes de diversas nacionalidades y contextos socioeconómicos donde los principios cristianos son la base para la convivencia y el aprendizaje.
En Argentina, la Fundación Mano Amiga ha tenido un impacto similar. En Pilar, la Fundación mantiene el Colegio Mano Amiga Santa María, que abrió sus puertas en 2003. Este colegio comenzó con 39 alumnos y ha crecido constantemente, brindando formación integral a estudiantes de diversas procedencias. Su modelo educativo tiene un enfoque doble, pues además de preparar a los alumnos en el área académica, les otorga herramientas profesionales como el bachillerato en Economía y Administración y la certificación en Programación Básica. Esta formación no solo busca el desarrollo académico, sino también el compromiso social y cristiano de los estudiantes, para que puedan ser agentes de cambio en sus comunidades.
Lo que distingue a los colegios Mano Amiga en Chile y Argentina es que los alumnos participan en múltiples proyectos apostólicos y comunitarios, desarrollando un sentido de responsabilidad social que va más allá del salón de clases. Además, la alianza con las familias es un pilar esencial de estos colegios, ya que se reconoce que los padres son los primeros educadores de sus hijos, y el acompañamiento escolar debe ser complementario a este rol.
Educadores y directivos comparten su experiencia
Marcela Estebanez, consagrada y directora del Colegio Everest, explica que los colegios Regnum Christi no solo se distinguen por la calidad académica, sino por la formación integral que sus estudiantes reciben. En sus palabras, «la fe no solo se enseña, sino que se vive», y eso se refleja en la experiencia diaria de los alumnos. La formación espiritual, que va de la mano con la excelencia académica, es un pilar fundamental de la identidad de las instituciones educativas. Esta enseñanza vivencial permite que los estudiantes no solo aprendan, sino que se transformen, encontrando en Cristo su modelo y fuente de inspiración.
Por su parte, el P. Luis María González de Aguilar, sacerdote legionario de Cristo, director del Instituto Humanista de la Santísima Trinidad, resalta la importancia de la red de colaboración entre los distintos colegios. Para él, ser parte de una red no es solo una cuestión administrativa, sino una verdadera experiencia de comunión y apoyo mutuo. La capacidad de compartir experiencias y buenas prácticas entre los colegios fortalece la identidad y misión, permitiendo que cada colegio, a pesar de sus diferencias, esté alineado en su objetivo común: formar personas capaces de transformar el mundo con sus talentos humanos y espirituales.
Paula Muñoz, cuenta con 25 años de experiencia en los Colegios Regnum Christi. Su labor como directora de Identidad, coordinadora de Pastoral y Familia ha sido fundamental en el fortalecimiento del enfoque cristiano y humano que caracteriza a los centros educativos de esta red. Paula destaca que un enfoque de valor de Colegios Regnum Christi es el compromiso con la formación integral, que va mucho más allá de la excelencia académica. Según ella, los colegios son comunidades vivas donde se busca acompañar a los estudiantes en su proceso de «cristificación», un proceso de transformación interior que permite a cada alumno desarrollar su máximo potencial en Cristo. Este enfoque no se limita a imitar a Jesús, sino que busca hacer que Cristo viva en cada uno de nosotros, una experiencia de profunda conversión que toca todos los aspectos de la vida del estudiante.
Uno de los pilares fundamentales de este enfoque es la alianza entre el colegio y la familia. Como explica Paula, los padres son los primeros y principales educadores de los niños, y el colegio cumple una función complementaria en este proceso. La formación que se ofrece en los colegios no se limita a las clases, sino que también involucra a las familias en un camino de fe y transformación. Este acompañamiento no solo busca fortalecer la vida espiritual de los estudiantes, sino también involucrar a los padres, ayudándolos a convertirse en auténticas comunidades evangelizadoras dentro de sus hogares.
Un futuro de esperanza y transformación
En un mundo cada vez más dividido y polarizado, los Colegios Regnum Christi en Chile y Argentina buscan ser un faro de esperanza. A través de su enfoque educativo integral, estos colegios están formando generaciones de jóvenes comprometidos con la fe, la familia y la sociedad. En 2024 año del Jubileo de la Esperanza y con un corazón lleno de esperanza, estos colegios siguen adelante, comprometidos con la misión de formar a los líderes que puedan transformar positivamente a la sociedad.
Colegios en Chile:
- Colegio Cumbres
- Colegio Everest
- Colegio Highlands
- Colegio San Isidro
- Colegio La Cruz
- Colegio Maitenes
- Mano Amiga San Juan Diego
- Mano Amiga Santa Teresa de Jesús de los Andes
- Mano Amiga Santa María de Guadalupe
- Colegio Fernández León
Colegios en Argentina:
- Colegio Oakhill Pilar
- Colegio Oakhill CABA
- Colegio Betania
- Mano Amiga Santa María
- Instituto Humanista de la Santísima Trinidad
Crédito de las fotos: Colegios Regnum Christi Chile-Argentina
