Somos hombres que, respondiendo a una llamada de Dios, entregamos nuestra vida entera al servicio de la Iglesia como laicos consagrados a Cristo en el Regnum Christi, enviados a vivir y difundir la buena nueva de ser apóstoles en el mundo social y profesional.
Salimos al encuentro de los demás con nuestros talentos personales y con nuestra profesión y, junto con ellos, buscamos hacer presente el Reino de Cristo en la sociedad.