Impulsando la formación de Líderes de Acción Positiva
Egresados Anáhuac entre los 300 líderes más influyentes de México
La Universidad Anáhuac impulsa la formación de personas íntegras desde 1964. Testimonio del Liderazgo Profesional de Nuestros Egresados, son los 35 miembros de la Comunidad Anáhuac que forman parte de la prestigiosa lista de Los 300 líderes más influyentes de México, que les reconoce como los líderes más destacados de nuestro país; quienes reciben esta distinción, son hombres y mujeres llamados a tomar la gran responsabilidad de servir a la sociedad.
El 25% de las personas reconocidas en la categoría de Empresarios, son egresados Anáhuac, lo que consolida la misión de la Universidad de formar Líderes de Acción Positiva que contribuyan a la sociedad.
Para celebrar a los líderes que integran la lista, se realizó la comida anual de los 300 líderes, evento que contó con la presencia del Secretario de Turismo, el Lic. Enrique de la Madrid Cordero.
Los miembros de esta comunidad reconocidos en la lista, son personas que se han distinguido como empresarios, deportistas, miembros del poder ejecutivo y judicial; líderes que promueven la cultura, líderes que impulsan acciones sociales desde asociaciones de la sociedad civil, todos con un sello distintivo: su profunda formación humana y moral inspirada en los valores perennes del humanismo cristiano y su genuina conciencia social; son líderes que con acciones positivas, promueven el auténtico desarrollo del ser humano y de la sociedad.
Durante la comida de Los 300 estuvo presente el Rector, Dr. Cipriano Sánchez García, L.C.; los vicerrectores del campus norte y sur respectivamente, el Dr. Bernardo Rangel Sada y el Mtro. Jorge Miguel Fabre Mendoza; así como autoridades de la Red de Universidades Anáhuac, el rector de la Universidad Anáhuac Puebla, el Mtro. José Mata Temoltzin y el rector de la Universidad Anáhuac Querétaro, el Mtro. Luis Alverde Montemayor.
Cabe destacar que la Universidad Anáhuac México es una comunidad con más de 65 mil egresados quienes promueven el auténtico desarrollo del ser humano y de la sociedad, que actúan con la convicción de la dignidad de la persona, de la solidaridad social y en el propio deber de la construcción de un mundo justo y sin exclusiones.