Lunes 5 de abril de 2021 – Dos anuncios
H. Miguel Pastrana, L.C.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Señor, dame la gracia de confiar más en Ti. Hay muchas incertidumbres y dilemas en mi vida, por eso te pido que incrementes mi confianza en Ti. Sé que muchas veces me quedaré en mí mismo, pero quiero estar más cerca de Ti.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Mateo 28, 8-15
Después de escuchar las palabras del ángel, las mujeres se alejaron a toda prisa del sepulcro, y llenas de temor y de gran alegría, corrieron a dar la noticia a los discípulos. Pero de repente Jesús le salió al encuentro y las saludó. Ellas se le acercaron, le abrazaron los pies y lo adoraron. Entonces les dijo Jesús: «No tengan miedo. Vayan a decir a mis hermanos que se dirijan a Galilea. Allá me verán».
Mientras las mujeres iban de camino, algunos soldados de la guardia fueron a la ciudad y dieron parte a los sumos sacerdotes de todo lo ocurrido. Estos se reunieron con los ancianos, y juntos acordaron dar una fuerte suma de dinero a los soldados, con estas instrucciones: «Digan: ‘Durante la noche, estando nosotros dormidos, llegaron sus discípulos y se robaron el cuerpo’. Y si esto llega a oídos del gobernador, nosotros nos arreglaremos con él y les evitaremos cualquier complicación».
Ellos tomaron dinero y actuaron conforme a las instrucciones recibidas. Esta versión de los soldados se ha ido difundiendo entre los judíos hasta el día de hoy.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio
Por un lado, las mujeres que se encontraron a Jesús y descubrieron el tesoro de la vida. Me parece muy interesante como el Evangelio presenta a las mujeres como las primeras testigos de la resurrección del Señor, esto es porque una mujer puede ser testigo de la vida en dos formas. La primera es cuando da a luz un hijo o es una madre espiritual, se convierte así en una misionera de la vida porque lleva este mensaje a su familia y a la gente con la que se encuentra. La segunda forma, en la que es testigo de la vida, es cuando llega al punto de comunicar la experiencia de qué significa tener un encuentro personal con Jesús, como las mujeres del Evangelio, quienes, por gracia de Dios, pudieron convertirse en comunicadoras de la vida que no se acaba.
Por el otro lado, los soldados, su experiencia con el resucitado es muy diferente, ya que aun teniendo este encuentro totalmente fortuito con Jesús, que sale de la tumba para dar vida, lo cual solo se explica por el poder de Dios. Sin embargo, ellos escogen la mentira. Motivados por diferentes cosas y presionados por las circunstancias cedieron a cubrir el milagro más grande la historia con un cuento falso. Negar la resurrección del Señor con una mentira, buscando que la fe cristiana pareciera una tontería.
Dios tiene sus caminos y sus formas para hablar a la gente. Él elige estas formas que a veces a nosotros nos parecen impensables, que no tienen sentido, pero lo adquieren cuando vemos los eventos a la luz de la fe y confiados de la mano de Dios.
«Algo extraño: las mujeres que dijeron «vamos temprano porque los soldados vendrán y nos crucificarán». Los soldados que vigilaban el sepulcro hicieron lo mismo: habían visto la verdad, pero luego prefirieron vender su secreto y «asegurémonos: no nos metamos en estas historias, que son peligrosas». Un momento de crisis es un momento de elección, es un momento que nos coloca frente a las decisiones que tenemos que tomar: todos en la vida han tenido y tendrán momentos de crisis. Crisis familiares, crisis matrimoniales, crisis sociales, crisis laborales, muchas crisis … Esta pandemia es también un momento de crisis social. ¿Cómo reaccionar en ese momento de crisis?»
(Homilía de S.S. Francisco, 2 de mayo de 2020, en santa Marta).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Agradecerle a una mujer por el don de la vida que ha dado a sus hijos, ya sea física o espiritual.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.