Sábado 13 de agosto de 2022 – «Debes hacerte como niño»
Iván A. Virgen, LC
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
Cristo, Rey nuestro.
¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Dios mío, Tú eres mi Padre. Te agradezco por toda tu ternura y cuidado. Hoy quiero estar cerca de ti y gozar de tu presencia. Estando contigo aprendo el valor de la gratuidad.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Mateo 19, 13-15
En aquel tiempo le presentaron unos niños a Jesús para que les impusiera las manos y rezara por ellos, pero los discípulos les regañaban. Jesús dijo: «Dejadlos, no impidáis a los niños acercarse a mí; de los que son como ellos es el Reino de los cielos». Les impuso las manos y se marchó de allí.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio
El día de hoy tenemos un Evangelio sencillo y de pocas palabras. Debemos hacernos como niños para entrar en el Reino. Un niño no necesita muchas palabras para entender algo, le basta una indicación. Es verdad, los niños son necios muchas veces y no hacen lo que se les pide, pero deberíamos preguntarnos de vez en cuando si lo que falla son los niños o la manera en que nos comunicamos con ellos. Muchas veces nuestro error está en pensar en los niños como seres inferiores o no dotados de todas las capacidades de un ser humano. Es cierto que un niño está creciendo, se está desarrollando y todavía no tiene una visión integral de la vida en su conjunto, pero un niño sí tiene sueños, incitativas, deseos de ser visto y apreciado. Para un niño su familia lo es todo, de ellos encuentra su seguridad y de ellos busca la afirmación.
Hoy podemos recuperar algo de lo que hemos perdido con el paso del tiempo, esa inocencia pura y disponible para dejarse sorprender y descubrir en una caricia todo el afecto de una persona. Hoy es un buen día para volvernos niños y de manera especial en relación con Dios y buscar nuestra afirmación en Él, buscar su mirada y descubrir su amor en lo que nos circunda.
«Qué bonita esa confianza de los padres, y esa respuesta de Jesús. ¡Cuánto quisiera que esta página se convirtiera en la historia normal de todos los niños! Es verdad que gracias a Dios los niños con graves dificultades encuentran con mucha frecuencia padres extraordinarios, dispuestos a todo tipo de sacrificios y a toda generosidad. ¡Pero estos padres no deberían ser dejados solos! Deberíamos acompañar su fatiga, pero también ofrecerles momentos de alegría compartida y de alegría sin preocupaciones, para que no se vean ocupados sólo en la routine terapéutica». (S.S. Francisco, Catequesis del 8 de abril de 2015).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Hoy voy a agradecer sinceramente los servicios que se me brinden.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.